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jueves, 26 de julio de 2012

[RECETA] Burritos de carne (mi versión)

Burritos que yo preparé

Una de las cosas que me encanta hacer en la vida es cocinar. Lástima que el tiempo no me permita pasar más tiempo inventando cosas. La receta que les presentaré hoy fue hecha en un momento de antojo por comer algo rico y relativamente rápido de preparar. Buscando por aquí y por allá, di con varias recetas de burritos de carne, pero ninguna me satisfizo al 100%, así que se las presento y me cuentan qué tal les parece.

Burritos de carne

Ingredientes (4 personas)


  • 12 tortillas XL para burritos Pancho Villa
  • 250grs de carne molida
  • 1 cebolla mediana
  • 3 paltas
  • 1 lata pequeña de crema de leche (o crema agria)
  • Queso rallado/en tiras/salsa de queso
  • 1 lata de porotos negros (frijoles rebozados negros) Pancho Villa
  • 1 sobre de sazonador para burritos Pancho Villa (en su defecto, se puede usar ajo y un poco de ají o merquén)
Preparación: Corta la cebolla en pluma y ponla en un sartén con aceite a sofreír, junto con la carne molida, hasta que esté todo bien cocido. Luego agrega el sazonador para burritos y cocina por 5mins (la cantidad es a gusto, dependiendo si te gusta picante o no. Yo agregué sólo una cucharadita, para que no quedara tan picante). En otro recipiente, pela y muele las paltas. Se puede aliñar a gusto o no. En un sartén, pon los porotos negros con un poquito de aceite y caliéntalos, revolviendo de vez en cuando. Para rellenar los burritos, debes poner una tortilla en un plato (previamente calentada, ya sea en microondas por 30segs a temperatura alta o en horno convencional envuelta en papel aluminio) y agregar una cucharada de cada ingrediente en el centro: carne y cebolla, palta, porotos, crema y queso. Para sellar el burrito, debes hacer un doblez en la parte inferior y en uno de los lados, para luego enrollarlo en sí mismo. Sirve inmediatamente. Puedes acompañar el plato con arroz o lechuga a gusto.

p.s. Usé productos de la marca Pancho Villa sólo por gusto, pero cada uno puede buscar la alternativa que más le acomode.
p.s.2 No se debe agregar una cantidad muy grande de ingredientes al burrito, de lo contrario no se podrá cerrar y se perderá la gracia del plato.
p.s.3 Si no les gusta la palta, pueden reemplazarla por pimientos verdes y rojos picados e incluso por arroz mexicano, para acercarse más a la receta original. Yo no lo hice por tiempo y porque no me gustan los pimientos :D
p.s.4 En la receta original, aparece la crema agria en vez de la crema de leche común. Si no la encuentras, puedes hacerla mezclando 200grs de crema de leche con una cucharada sopera de limón y dejar reposar por un par de horas. 

¡Que la disfruten!




lunes, 23 de julio de 2012

La teta en público

Tomada de "Amor Maternal"


Creo que esta imagen ilustra a la perfección lo que se me viene a la cabeza cuando otras mujeres criticar el dar teta en público (me resisto a usar el término "mamas", "pechos", "bubis", etc.), un acto tan natural y tan condenado.
Recuerdo en una ocasión en que íbamos en el tren con mi marido y mi Poroto, el cual sintió la imperiosa necesidad de poner sus manitas en el par de elevaciones que tengo y a gritar "tetaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, mamá, tetaaaaaaaaaaaaaaaaaaa", a lo cual obedecí inmediatamente, me bajé la polera y le puse su bidón en la boca para que se calmara. No me imaginé que tal acción de alimentar a mi hijo iba a causar tantas ronchas en una señora que se puso a alegar como mala de la cabeza. Lo más gracioso de todo, es que en ningún momento me habló a mí directamente, sino a una señora sentada al lado de ella y que movía la cabeza abrumada por la sarta de disparates que me llevé "cómo se le ocurre a la tontita esa sacar la pechuga para darle al cabro chico, que no se da cuenta que hay hombres aquí y los puede provocar, es una falta de respeto lo que está haciendo" y bla, bla, bla... Como estaba concentrada en lo que estaba haciendo en ese momento, es que decidí no contestarle... verbalmente, porque mi cara de repudio era evidente, junto con la interlocutora de la señora esta que no hallaba cómo hacerla callar.
La alharaca reacción de ella me dejó pensando en varias cosas. ¿Quién es más retorcid@? ¿la que saca la pechuga para alimentar a otro o quien se pasa rollos por eso? No sé en qué mundo el "perreo intenso", mostrar los calzones, escotes pronunciados, desnudos en la TV en horario familiar, etc. son aceptados socialmente, pero una que alimenta a un bebé en un acto puro de amor, es una bataclana y una "provocadora de hombres", si una persona ve la "maldad" donde no la hay, es porque no respeta su cuerpo (sino que lo "cosifica") y urgentemente necesita una visita al psiquiatra. Además de eso, en un mundo en que la flojera y el "qué dirán mis amiguis" también es causal de renuncia a la lactancia materna (triste pero cierto), creo que mostrar que una no se deja llevar por absurdos y a pesar todos los contra que puede tener (la LM no es pan comido, pero de eso escribiré más adelante), igual una se aferra a lo natural, y lo natural es dar teta cuando la guagua tiene hambre. Y tengan por seguro que no me voy a esconder porque a una señora morbosa le provoque quizás qué cosas.

¡Tetas unidas! ¿y qué tanto?


sábado, 21 de julio de 2012

Y te fuiste en paz, viejo

He andado ausente de esta cosa porque hace un par de meses recibimos una noticia que cambió nuestras vidas: mi papi se cansó de luchar contra el cáncer al colon que lo aquejaba y decidió llevar su alma a lo más alto. Fueron 6 meses intensos, desgastantes, sobre todo para mi mamá, que estuvo a su lado hasta el final.

Si bien es cierto su cáncer estaba bastante avanzado, siempre en mi corazón albergaba la esperanza de un milagro, como tantas veces ha salido en las noticias: que los monjes brasileños, que el escorpión azul y tanta cosa que aparece, pero en este caso no ocurrió, y entre suspiros y despedidas, simplemente partió de este mundo a esperar que nos toque la hora a nosotros.

Estos meses han sido de reflexión, de ajustes, de acostumbrarse al vacío que deja. He tratado de no hacerme tantas preguntas de "qué hubiese pasado si...", "por qué no....." y otras, no vale la pena. Lo que me deja en paz con él y conmigo misma es que siempre supo que lo quería, siempre tuve la oportunidad de decírselo; también sé que él luchó en su enfermedad hasta lo que más pudo, que mi mamá y mi familia en general se desvivió por él, para tener un mejor pasar cuando no había más qué hacer; compartió conmigo mis mayores alegrías y también mis mayores penas, siempre me apoyó en todo lo que emprendí, total, sabía que cualquier decisión que tomaba, era con el corazón; y por sobre todo, Poroto tuvo la oportunidad de conocer a su abuelo chocho, que lo adoraba y que siempre sonreía con sólo escuchar su voz... Qué más puedo pedir.

No quiero ahondar más en el tema a decir verdad, prefiero dejarlo para mí y mi familia. Tan sólo agradecer los abrazos, palabras de aliento, mensajes en este duro momento, se siente más calientito el corazón.

Mi papá y mi hijo





"Yo soy tu sangre, mi viejo" (Piero)